Por tí carnaval mi locura perdida, Mi forma de amar, de cantarte a diario, Por la libertad que le has dado a mi vida, Mi diosa medida, revolucionario. Por tí carnaval que de orgullo me llenas, Orgullo, de ser el cantor que las noches pasó dandole a la guitarra. De haber taladrado la piel de la hermnsa mujer que las noches me vela, De verme tan lleno y feliz, que sin ella y sin tí, Esta vida se acaba. De cantar, orgullo de cantar, con mi comparsa las cosas que pasan a mi alrededor, pa que el mundo se entere por la voz del pueblo, La voz de mi pueblo, que siempre estaremos los carnavaleros al pié del cañon. CANTANDO CON VALENTÍA AÚN SABIENDO QUE UN DÍA SE ESCAPA UNA BALA Y NO VOLVERÉ LA CARA MIENTRÁS DURE MI CANCIÓN. PERO A VECES DE RABIA GRITO, MI ALMA NO DÁ PA TANTO, TÚ NO SABES EL TRABAJITO, QUE A RATITOS ME ESTÁ COSTANDO. YO CON ESTA CARA DE TONTO, PA DESPERTAR TU CONCIENCIA Y TÚ SIGUES SACANDO A HOMBROS MUÑEQUITOS DE LAS IGLESIAS. Menos mal que a todas horas, Estas canciones que canto, Fueron la banda sonora, De esos amores que tanto, Se cantaron para tí: "La soledad es testigo" "un amigo es un amigo" y "yo me enamoré de tí" Y aunque sé que otra canción dá mas fama y más dinero, Yo sigo con mi condición, orgullo de carnavalero. Y es tan inmenso el orgullo y tanta mi condición, Que la calabaza de mi bastón ya te la he cambiado por un plumero, Y que el día que me falte este vendito estandarte, Ese día me muero.
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