Pasado el carnaval, pasadas las críticas al Patronato, nos disponíamos con la ilusión de un tiempo nuevo a construir un nuevo sistema de participación, para que los carnavaleros que hasta el momento no nos sentíamos representados tuviéramos voz y voto en la elaboración de nuestro concurso, como activo importantísimo de la cultura y la tradición de nuestra ciudad.
Según tenemos entendido, porque todo se está llevando en el más riguroso de los secretos, cinco autores, por supuesto de los 6 primeros, han constituido una Asociación de Comparsistas que ya negocia con la concejalía, pero, ¿a quiénes representan? ¿Quién les otorga el poder para negociar en nombre de la modalidad?
En la búsqueda de un nuevo sistema hemos encontrado una fórmula más excluyente (si cabe) dónde la mayor preocupación son la recuperación de los derechos de Youtube. Es muy legítimo la defensa de lo que te corresponde, pero no creo que sea base ni preocupación colectiva para construir un mejor concurso. Hemos luchado juntos contra un enemigo común, y en pro de un objetivo ilusionante, y ahora resulta que para lo nuevo ya no somos tan importantes. O sea, que todo sigue igual.
Ni que decir tiene que en esta pseudo-representación de la comparsa, no sólo se excluye por pedigree, sino que también se da por hecho que a los comparsistas sólo los representan los autores. ¿No representan a la comparsa directores, componentes, postulantes ?
Ángel Subiela, Carli, Lores, Pacoli, Jorge el Negro, Carmen Barea, los componentes de las comparsas de tan exclusivo club; y los autores Pepe Martínez, Antonio Martín, Iván Romero, Faly Pastrana, Jonathan Pérez, Miguel A. Gª-Argüez, Nono Galán, Nene Cheza, Juan Fernández, Fran Quintana, Ángel y Piru, y muchos más compañeros y compañeras, y sus respectivos grupos también formamos parte de esto, y a buen seguro que no queremos que el chiringuito y la toma de decisiones principales que nos afectan a tod@s pasen de unas pocas manos a otras pocas manos, siendo estos quiénes sean, y sea el ayuntamiento del partido que sea.
No quiero que se negocie en nombre de los comparsistas si estos no están, y mucho menos quiero que me den a firmar un papel en el que no he formado parte de su construcción ni de la toma de decisiones, cuando cinco personas han decidido por mí lo que tiene que ser el concurso.
Tan sencillo es, como que sin comparsistas, no hay comparsas.
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Germán Rendón, autor de la comparsa OBDC, la vida es bella.
http://www.elviejolavaero.com/quienes-los-41-german-rendon/
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